Suelos anegados o con riesgo de compactación encuentran en los nuevos sistemas de rodamiento una forma de ganar tiempo, dinero y sustentabilidad.

El uso de máquinas cada vez más potentes, de mayor ancho de labor y envergadura, juega en contra de la sustentabilidad de los suelos. La compactación es un problema que crece y amenaza la siembra directa.

En contraposición también crece la adopción del sistema de rodamiento con orugas de goma. Un sistema disponible en las máquinas CLAAS, donde con una superficie de contacto de 2,8 m² el tren de rodaje de orugas TERRA TRAC permite un desplazamiento totalmente amortiguado protegiendo el suelo y la billetera.

El sistema de orugas viene cambiando la forma de abordar la agricultura, ya que pueden alcanzarse niveles de presión específica de hasta 4 veces menos que con neumáticos, lo que constituye un nivel mucho menor de compactación. También resulta una solución al momento de cosechar en suelos anegados por exceso de lluvias.

Sistema con bonus trac

El sistema TERRA TRAC disponible en las máquinas CLAAS permite un ancho de transporte acorde al traslado en, por ejemplo, rutas. La cubierta de la máquina crece a lo largo, por lo que puede trasladarse dentro de lo permitido. Además, la máquina no pierde la velocidad de traslado que va entre los 30 y 40 km/h, reemplazando a las antiguas orugas de hierro cuya velocidad máxima no superaba los 3,5 km/h.

También se gana estabilidad. El tránsito por suelos desparejos se vuelve complicado con los sistemas de rodamiento tradicionales, en el caso de las orugas esto no sucede y es posible usar sin inconvenientes plataformas de gran ancho de labor, como de 40 a 50 pies.

Además, es posible una mayor tracción sin caer en la doble tracción. También la cinta es muy competitiva en precio y hay que destacar que las orugas proveen, por la mayor flotación, una economía de combustible al disminuir la potencia que consume la máquina para moverse y que es mayor cuanto más se hunde el equipo en el terreno. k